La amasadora ha cambiado para bien los hábitos alimenticios de muchas familias.
Nacida hace más de un siglo, esta máquina, que reduce notablemente el tiempo necesario para preparar la masa básica de muchos platos, ha sido siempre una excelente aliada tanto de las mujeres trabajadoras como de las amas de casa, que pueden aprovechar la ayuda de un aparato que, hasta no hace muchos años, era casi exclusivamente de uso industrial.
Con el paso del tiempo, el tamaño de las batidoras amasadoras se ha reducido considerablemente, lo que ha permitido difundir objetos cuyas dimensiones se adaptan bien a las cocinas modernas, que rara vez disponen de grandes espacios. Incluso su precio es mucho más accesible que cuando aparecieron por primera vez en el mercado, aunque, los mejores modelos y con más funciones, requieren un presupuesto un poco ‘más sustancial.
Pero, ¿cómo funcionan las batidoras amasadoras?
Un movimiento rotatorio continuo, que se asocia a otro de revolución en el caso de la amasadora, se encarga de mezclar constantemente los ingredientes, creando una masa bien mezclada y libre de grumos.
Son preferibles a los procesadores de alimentos clásicos porque no es necesario seguirlos constantemente durante el proceso de amasado; basta con ajustar el programa y dejarlos trabajar, salvo algunas excepciones.
Masa de pan
Entre las diversas masas básicas que se pueden elaborar gracias a las amasadoras, la más común es sin duda la masa de pan.
Un recipiente con una capacidad de 5 litros es suficiente para obtener unos 2,5 kilos de masa. Pero, ¿cómo se obtiene la mezcla básica para el pan?
Primero toma los elementos necesarios, harina, sal, levadura y agua. Ya esta fase influirá en el producto final que puede tener, por ejemplo, una corteza más o menos crujiente.
Después de decidir qué tipo de ingredientes utilizar, proceda a pesarlos; evite utilizar demasiada sal porque no se disuelve fácilmente. Llenar el bol de la batidora, empezando por el agua, y luego verter la harina, que evitará que se pegue al fondo.
Haga funcionar la máquina a una velocidad media-baja para permitir que los distintos elementos se amalgamen correctamente. Al principio parecerá que los componentes no se unen, pero no hay que preocuparse, sólo hay que esperar un momento y ya está.
Si un poco de harina no se incorpora a la mezcla, basta con utilizar una espátula de madera humedecida para ayudar. Añadir la sal y la levadura y mezclar de nuevo, esta vez a velocidad alta.
Retirar todo del bol y dejarlo reposar para prepararlo para el horneado.
Masa de pizza
Después del pan, es sin duda el que más se elabora gracias al uso de una batidora amasadora de pizza.
La batidora de espiral es la que mejor se adapta a este tipo de recetas, aunque, con algunos trucos, también se puede utilizar una batidora amasadora.
Al igual que con el pan, en este caso es mejor empezar añadiendo los elementos líquidos al bol y luego añadir los sólidos. La masa de pizza, al ser de consistencia semidura, necesita algunas precauciones para mejorar el resultado final.
Se debe mantener bajo control la temperatura de la masa, que nunca debe alcanzar temperaturas superiores a los 25 grados para evitar que la pizza adquiera una consistencia esponjosa o sea demasiado frágil, o que se exalte de forma excesiva sólo el sabor de la levadura de cerveza.
Otro factor que no hay que subestimar es el relacionado con el encordado de la masa: con esta expresión se indica el momento de máxima tensión de la masa, más allá del cual se rompería la malla glutinosa. Un excelente nivel de encordado hará que el leudado sea perfecto y no dará lugar a una producción anómala de gas dentro de la base de la pizza.
El mejor accesorio a utilizar es el gancho K o el gancho de hoja.
La masa para la pasta casera
Este es quizás uno de los primeros usos vinculados a la utilización de la amasadora, y también el más ligado a las tradiciones culinarias.
Nuestras abuelas solían pasar muchas horas en la cocina para hacer pasta casera, pero por suerte las máquinas amasadoras, especialmente las amasadoras, vienen en nuestra ayuda.
Los ingredientes necesarios para este tipo de producto son huevos, harina y aceite.
En el bol de la batidora amasadora introduzca, en primer lugar, los huevos y la harina y, utilizando el gancho de hoja, para recoger cualquier residuo que se pegue al borde del bol, mézclelo todo a baja velocidad.
Después de esta primera fase, cambiar el accesorio y utilizar el gancho de amasar durante unos 5 minutos para que la mezcla quede suave, compacta y no pegajosa. Si tiene problemas durante el proceso de mezcla, añada una cucharada de aceite para mejorar la consistencia.
Es importante que la mezcla no sea pegajosa para facilitar su introducción en la laminadora. Este último es un accesorio de la amasadora creado específicamente para la necesidad de diluir la mezcla de la masa.
Una vez que la bola de masa esté lista, divídela en partes más pequeñas, envuélvela en un pañuelo de papel y déjala reposar en la nevera durante una hora aproximadamente antes de proceder con los siguientes pasos.
La masa para pasteles
La preparación de la masa quebrada, base de muchos pasteles, se ha vuelto mucho más fácil de hacer gracias al uso de la batidora.
Como ya hemos visto para la creación de los pasteles examinados hasta ahora, el primer paso es la inclusión de la harina en el bol, acompañada de la mantequilla, la vainilla, la sal y la ralladura de limón que se mezclará a través de la hoja de gancho o K, a baja velocidad.
Una vez que los elementos se combinan para formar una mezcla granulada, añadir el azúcar y los huevos y, a la misma velocidad, mezclar de nuevo durante unos dos minutos. Debe quedar una masa lisa y compacta.
Saque la bola obtenida, aplánela, envuélvala en un pañuelo de papel y póngala a enfriar en la nevera durante unos 30 minutos, o en el congelador durante 15. También en el caso de la realización de la masa para tartas se deben mantener bajo control diversos aspectos relacionados con la temperatura del producto durante el amasado y su ventilación para evitar la creación de burbujas en el interior del compuesto que puedan dar lugar a problemas en la fase de leudado y cocción.
La batidora amasadora es la que se utiliza principalmente en el campo de la pastelería.
